29 de septiembre de 2016

Venezuela. El neoliberalismo ejercita la falsificación de la historia

Casas del Plan Viviendas Venezuela
Clarín, vocero de la derecha argentina y mundial, se hizo eco de un pronunciamiento golpista de los gobiernos de Argentina, Brasil, México, Chile, Paraguay y Perú, que firmaron una declaración conjunta expresando su "preocupación" debido a que el Consejo Nacional Electoral de Venezuela (CNE) adoptó, según estos gobiernos de derecha, decisiones que tienen el "efecto de postergar" la realización del referendo revocatorio del presidente Nicolás Maduro hasta 2017. Cabe aclarar que no puede hablarse de "postergar" cuando la decisión del CNE se enmarca dentro de los tiempos previstos por la Constitución Nacional. El uso del término "postergar" claramente es tendencioso y apunta a que el lector desprevenido crea que se modificó un plazo previsto o fecha programada. 

No solo critican al Consejo Electoral por cumplir con los plazos que fija la Constitución de Venezuela, sino que además, por supuesto, nada dicen acerca de los objetivos reales de la derecha de este país que no es revocarle el mandato al actual presidente, Nicolás Maduro, sino que es tumbar el gobierno democrático de la República de Bolívar para iniciar desde allí el camino de borrar todo vestigio de la revolución chavista, que le dio trabajo, salud, educación, vivienda y dignidad a un pueblo invisible y aplastado en la miseria por estos mismos que hoy levantan su voz como líderes de la democracia. La falsificación de la historia, expresión acabada del neoliberalismo, es el objetivo final de Ramos Allup, Henrique Capriles, Jesús Torrealba o el asesino y condenado Leopoldo López.
Venezuela fue declarada libre de analfabetismo

Lo que la derecha le pide al Consejo Nacional Electoral es que viole la Constitución y les abra paso a sus objetivos golpistas. La fecha para iniciar el proceso que desemboque en el referéndum está fijada: el 26, 27 y 28 de octubre, al menos un 20% del censo del país -3,8 millones de personas-, deberá expresar su voluntad de que haya consulta en una campaña de recogida de firmas -y si lo logran- en un plazo de 90 días CNE llamará al referéndum revocatorio. No hay ninguna postergación, sino que hay tiempos constitucionales que respetar.

Nada dicen estos países que la derecha sifrina volvió a la idea del referendo después del manifestado y fracasado intento de tomar Caracas el 1 de septiembre, para derrocar al gobierno. ¿No es acaso subvertir el orden constitucional voltear un gobierno elegido por el voto popular? ¿Donde esta la OEA mientras la oposición venezolana intenta un Golpe de estado?

Es importante resaltar, y Clarín no lo hace, que la posibilidad de revocatoria de mandato, decisión soberana y democrática del pueblo, fue incluida en la última reforma democrática y popular que el gobierno de Hugo Chávez introdujo en la Constitución Nacional. Ni Argentina, ni Brasil, ni México, ni Chile, ni Paraguay, ni Perú tienen en su constitución la posibilidad de revocar a sus autoridades. Todos estos países tuvieron, o tienen, mayorías suficientes para realizar, en distintos momentos, convocatorias a Asambleas Constituyentes y reformar sus constituciones burguesas y no lo hicieron. Pero además, tanto Paraguay, como Brasil destituyeron a sus presidentes mediante golpes parlamentarios y judiciales. El gobierno argentino acaba de reconocer que el 33% de su población vive en la pobreza. En Chile se reprime ferozmente a sus estudiantes cuando reclaman enseñanza gratuita y de nivel o mantienen una posición imperialista cuando niegan la salida al mar de Bolivia. En México la persecución y muerte de los militantes sociales es moneda corriente. En Perú crece el hambre y miseria mientras la derecha se disputa el gobierno del país. ¿Cual es la autoridad que creen tener estos gobiernos neoliberales para hablar de Venezuela?. Es una demostración más de que se alinean ante la orden imperial de sumarse a la campaña contra la patria de Chávez.
El eje del "mal"

Es verdad que Venezuela atraviesa una dura crisis política y económica. La derecha utiliza a un pueblo preocupado por sus penurias en el desabastecimiento de alimentos y medicamentos que ellos han creado y lo utilizan, pero: ¿Cuando se preocupó Allup por el pueblo? ¿O acaso no fueron gobierno durante décadas?

Pero atención que este pueblo no ha perdido su amor por Chávez y se moviliza en defensa de la idea que su comandante sembró, aunque el gobierno no encuentre la forma de dar respuesta a los duros problemas sociales por los que atraviesan.

La derecha quiere el referéndum este año, porque no van por Maduro, sino que van por el chavismo, y Clarín se suma a esa campaña. A la derecha solo los junta la orden del imperio de acabar con el chavismo. Pero al pueblo los une Chávez. En esta puja la derecha es una bolsa de gatos y en el chavismo no ha surgido un líder claro que pueda seguir con el legado de Chávez.

En este punto está el interrogante mayor para quienes estamos al lado del pueblo de Venezuela, sentimos la ausencia de Chávez y estamos sumamente preocupados por la Bolivia de Evo. 


Ernesto Salgado
29/09/2016

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