El capitalismo mató a otro niño

El mundo se conmueve hoy con las imágenes de un niño, que sin vida trajo a la costa las olas del mar que intentó cruzar con su familia (incluyendo a su hermanito de 5 años, también muerto) huyendo de la guerra, de las bombas, de la locura, del hambre, de la injusticia… del mundo.

El mundo se conmueve hoy por la tragedia de los refugiados, que comienza en tragedia en su lugar de origen y termina en tragedia, aun peor, en su añorado lugar de destino que mira para otro lado, cierra fronteras, protege sus “territorios” y provoca con su desprecio la muerte de los niños con los cuales después se conmueve…

El mundo es más feo e injusto hoy.

¿Las potencias capitalistas descubrieron hoy que en el mundo hay niños? ¿Se conmueven por la muerte que producen? El colmo de la hipocresía…

Hoy descubrieron que en el mundo hay niños, y ¿qué hicieron al respecto? ¿Abrieron las fronteras?  ¿La Canadá que negó el asilo a esta familia que hará con el resto de los pedidos de asilo que llegarán? ¿Los traficantes de armas, imperialistas ellos, dejarán de armar a algunos grupos para que peleen contra otros en eternas guerras que les son muy rentables a ellos, los traficantes de armas? ¿Las empresas que luego del desastre ingresan a los países para “reconstruir” lo que ellos mismos destruyeron, que harán después de ver la foto del niño muerto? ¿Las potencias mundiales condonaron las deudas externas a los países que expulsan niños, mujeres y hombres por el hambre?

¿Cuántas fotos más necesitarán?

Quizá tantas como sea necesario hasta que la foto no sea de niños muertos, sea de pueblos de pie, en las plazas, en las casas de gobiernos, en la ONU, en las calles, en las escuelas, en los trabajos, en las autopistas, los campos, las montañas. Hasta que la foto sea de todos nosotros diciendo NO QUEREMOS MÁS NIÑOS MUERTOS. No queremos más en el poder a aquellos que los matan. NO queremos más CAPITALISMO.

Solo, ahogado, con miedo. Hoy murió otro niño.

Solo, ahogado, con miedo. Hoy el capitalismo mató a otro niño.

Los que nos conmovemos con la realidad y no necesitamos ver las fotos terribles, los que peleamos día a día por un mundo más justo, sin fronteras, sin hambre, sin pocos con todo y muchos con nada. Nosotros, hoy estamos conmovidos y muy enojados.